
Cada cierto tiempo, en el mundo del deporte, descubrimos nuevas prácticas que suponen una revolución y que atraen a un gran número de personas a realizarlas. En los últimos años se ha popularizado una disciplina de entrenamiento muy completo y de alta intensidad cuya práctica se ha extendido como la pólvora.
Estamos hablando, como no, del crossfit, el deporte de moda en la actualidad y del que seguramente hayas oído hablar a algún amigo o conocido que lo practique.
¿Qué es el CrossFit?
El crossfit se define como un programa de acondicionamiento físico mediante ejercicios que se realizan de forma constante, y en el que se entrenan las que se consideran las diez aptitudes físicas más importantes según especialistas de la actividad física.
Desde la potencia y la fuerza hasta la resistencia cardiorrespitaroria, el equilibrio y la flexibilidad. Este tipo de entrenamiento trabaja de forma total todo nuestro cuerpo, permitiéndonos mejorar en todos los ámbitos a nivel físico de forma general sin descuidar ningún aspecto.
Inicialmente se desarrolló como un programa de entrenamiento para el cuerpo de policía de California, pero pronto empezó a extenderse a otros cuerpos norteamericanos como los Marines e incluso bomberos.
Nace de la mano de Greg Glassman, fundador de la empresa CrossFit, quien se dio cuenta que el entrenamiento habitual con pesas apenas modificaba aptitudes físicas y se centraba más en el tema muscular.
Mediante sesiones de alta intensidad y de rutinas cortas, que incluyen ejercicios funcionales y que impliquen diversos grupos musculares, se trabaja durante 45 minutos o una hora aproximadamente.
Normalmente no se deben realizar más de dos o tres sesiones semanales, lo que permite mayor flexibilidad para aquellas personas que no dispongan de mucho tiempo para dedicar al deporte. Además, a esto hay que sumarle un alto componente motivacional y de superación que está presente en cada sesión.
Diabetes y CrossFit, una buena combinación
La actividad física es muy importante para la salud, especialmente para las personas con diabetes, ya que ayuda a prevenirla y a mejorar su autocontrol.
Al tratarse de una práctica deportiva donde podemos encontrar desde ejercicios aeróbicos hasta movimientos halterofílicos en sesiones cortas de alta intensidad, sus sesiones serán muy completas y no solo mejorarán nuestra fuerza y resistencia sino también nuestra salud cardiorrespiratoria.
En este artículo ya os hablamos de los beneficios de los entrenamientos de alta intensidad para la diabetes, y aunque no es lo mismo que el CrossFit, ya que este no se centra únicamente en el plano cardiovascular, sí que nos ofrece algunas ventajas de este tipo de entrenamiento sumadas al resto de mejoras físicas.
Un estudio publicado en la revista Experimental Physiology sobre pacientes de diabetes tipo 2 con sobrepeso, demuestra que éstos mejoraron la habilidad para controlar los niveles de glucosa en sangre.
Hay que tener siempre en mente las recomendaciones de nuestro especialista a la hora de realizar ejercicio físico con diabetes, especialmente en aquellas disciplinas como el CrossFit que supongan un impacto fuerte debido a su intensidad.
La práctica de ejercicio físico nos ayudará a mejorar nuestro control sobre la glucemia, a perder peso y bajar nuestro porcentaje de grasa corporal, reducirá el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y nos aportará muchas ventajas a nivel físico y anímico.
Os recordamos que, si queréis más información sobre los beneficios de la actividad física para personas con diabetes, podéis echar un vistazo a nuestra guía práctica sobre la actividad física y diabetes que podréis encontrar en nuestra web.
Referencias:
- Soluciones para la diabetes. Un entrenamiento interválico de alta intensidad es beneficioso para la DT2. Consultado el 30 de marzo de 2020.
- Infosalus. El 'crossfit' puede ayudar a los diabéticos a controlar sus niveles de azúcar. Consultado el 30 de marzo de 2020.