Los múltiples beneficios de la marcha nórdica

La marcha nórdica es una excelente forma de hacer ejercicio aeróbico y disfrutar de largos paseos, y que está al alcance de todo el mundo.

La marcha nórdica ofrece múltiples beneficios

La actividad física es imprescindible para llevar un estilo de vida saludable, sin importar nuestra condición. La práctica de algún deporte o actividad nos proporcionará muchísimos beneficios, pero es importante conocer antes de empezar, cuál es nuestro objetivo y cuáles son nuestros límites para evitar lesiones.

El ejercicio aeróbico es altamente recomendable por la cantidad de beneficios que aporta, y además hay multitud de opciones y variantes para poder adaptarnos a nuestras características y metas. Hoy hablaremos sobre la marcha nórdica, una modalidad que hará que movamos todo nuestro cuerpo y que nos ayudará a mejorar nuestra salud.

¿Qué es la marcha nórdica?

Esta disciplina nace en Finlandia la década de 1930, de la mano del equipo nacional de esquí finés. Durante los meses de verano, y ante la imposibilidad de practicar este deporte por la falta de nieve, idearon este sistema para simular el movimiento que se realiza con los brazos al hacer esquí nórdico. De esta forma podían seguir practicando la técnica del esquí y a su vez mantenían y potenciaban su estado físico aeróbico.

Utilizando bastones o palos de esquí, caminaban o corrían apoyándose en ellos como hacían mientras esquiaban. Al ser un ejercicio que, a diferencia del running, apenas tiene impacto sobre las articulaciones, también evitaban lesiones y llegaban en plena forma a la temporada de esquí. De hecho, el impacto que tiene la marcha nórdica es el mismo que cuando caminamos.

Que sea una práctica que consiste en caminar con bastones, no significa que no deba realizarse de forma correcta. De hecho, es un tipo de caminata muy técnica y requiere de un proceso de aprendizaje para dominarla y beneficiarnos al máximo de ella. A diferencia del senderismo, que también podemos utilizar bastones para asegurar el paso y ayudarnos a subir alguna cuesta, en la marcha nórdica los bastones sirven para aumentar la distancia de la zancada y ganar en amplitud de movimiento.

Además, para practicar marcha nórdica debemos utilizar unos bastones creados específicamente para esta actividad, por lo que no nos servirá cualquiera.

Beneficios de la marcha nórdica

Algunos de los beneficios de la marcha nórdica son los mismos que podemos obtener mediante la realización de cualquier otro tipo de ejercicio aeróbico. Como ya hemos dicho muchas veces, este tipo de ejercicio es ideal para las personas con diabetes.

Precauciones antes y después de la práctica deportiva

Como principal diferencia a otros tipos, como el power walking o el running, la marcha nórdica involucra en mayor medida el uso de las extremidades superiores, haciendo que sea una práctica ideal para mejorar a nivel general.

Algunos beneficios de la marcha nórdica son:

  • Refuerza el sistema inmunitario.
  • Mejora la sensación de bienestar.
  • Mejora la coordinación de las extremidades superiores e inferiores.
  • Fortalece la musculatura en general, sobre todo en brazos y piernas.
  • Ayuda a perder peso o a mantenerlo, en función de la intensidad y objetivos.
  • Mejora la postura corporal y fortalece la espalda.
  • Activa y mejora el sistema cardiovascular.
  • Reduce el impacto en tobillos y rodillas respecto a otras actividades.

Como vemos, la marcha nórdica proporciona muchos beneficios asociados al running pero eliminando algunos riesgos derivados de esta práctica. Esto no quiere decir que no exista riesgo de lesión al hacer marcha nórdica, ya que un uso incorrecto de los bastones puede provocar lesiones en las articulaciones a largo plazo.

Al ser un tipo de ejercicio que no requiere de una intensidad muy elevada y que no genera más impacto en nuestros músculos y articulaciones que caminar, es ideal para las personas mayores.  Aún así, cualquier persona sin importar su edad y su condición puede practicarlo y aprovecharse de sus beneficios.

Antes y después siempre será recomendable realizar estiramientos para evitar hacernos daño y empezar a hacer deporte en frío. El calzado también es importante, y debemos adaptarlo al terreno por el que vayamos a hacer la marcha (montaña, asfalto, arena). Y no podemos olvidar la hidratación, ya que normalmente las sesiones de marcha nórdica es recomendable que sean relativamente largas, así que también es aconsejable llevar algo de comer.

Recordad que, en el caso de las personas con diabetes, siempre es recomendable consultar con nuestro especialista médico antes de iniciar una nueva práctica deportiva para evaluar su idoneidad.

Referencias:

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La información proporcionada en este artículo no reemplaza la relación entre el profesional sanitario y su paciente. En caso de duda, consulte siempre a su profesional sanitario de referencia.