Chocolate y diabetes, ¿puedo comerlo?

Comer chocolate si tenemos diabetes a veces plantea algunas dudas: ¿Es bueno comerlo? ¿Qué tipo es mejor?

Chocolate negro y diabetes

La alimentación de las personas con diabetes es un tema que siempre está envuelto de muchas dudas, mitos y falsas creencias. Siempre insistimos en la importancia de la educación diabetológica porque ayuda a disipar estas dudas, pero entendemos que no podemos conocer todos los detalles sobre todos los temas, especialmente en lo referente a la alimentación.

Dentro de este tema, existe un tipo de alimento que tiene bastantes variantes y que a menudo nos hace dudar sobre si es apropiado para las personas con diabetes o no: el chocolate. Y esto ocurre porque en función del tipo de chocolate que consumamos nos aportará más o menos beneficios y es más o menos recomendable. ¡Empezamos!

¿Es bueno el chocolate si tengo diabetes?

Depende. Como decíamos, existen muchos tipos de chocolate y no comparten propiedades, por lo que es importante conocer las diferencias y qué nos aporta cada uno. Dentro de la familia del chocolate, podemos encontrar:

  • Chocolate negro
  • Chocolate con leche
  • Chocolate blanco
  • Chocolate con cereales o frutos secos
  • Chocolate con frutas

De todos ellos, el que menos nivel de azúcar tiene es el chocolate negro. Para que tenga esta consideración, ha de tener mínimo un 43% de cacao (lo que es bastante bajo para los amantes del chocolate negro).

Esto implica que a medida que aumentamos el porcentaje de cacao, se reduce el nivel de azúcar y grasa pero aumenta el sabor amargo.

En el resto de tipos de chocolate se introducen elementos a la mezcla para modificar su sabor: leche en el chocolate con leche, manteca de cacao y azúcar en el chocolate blanco, o frutas y frutos secos en los otros dos. Lógicamente esto hace que su valor nutricional sea muy diferente, y también que aumente el nivel de azúcar que encontraríamos en ellos.

Puestos a consumir un tipo de chocolate, se podría decir que el chocolate negro es el que menos aspectos negativos podría presentar. Estudios recientes incluso señalan que comer chocolate negro podría ayudar a mejorar la sensibilidad a la insulina (y también este otro estudio).

Beneficios del chocolate negro

Teniendo claro que el chocolate negro es el que más contenido en cacao tiene, y que el cacao es el que aporta los beneficios gracias a los flavonoides que forman parte de él, nos centraremos en este tipo para ver qué beneficios aporta su consumo.

  • Contiene feniletilamina, un componente que libera el cerebro de forma natural y que tiene propiedades antidepresivas.
  • Es rico en antioxidantes que mejoran la salud cardiovascular, como las procianinidnas o las catequinas.
  • También disminuye la presión arterial y mejora la circulación gracias al óxido nítrico.
  • Sus antioxidantes también benefician a la piel, retrasando los efectos del envejecimiento.
  • Tiene efectos saciantes, por lo que una pastilla de chocolate negro es una buena forma de acabar una comida.

Estos son algunos de los más destacados, pero siempre hablando del chocolate negro. Eso no quiere decir que otros tipos de chocolate no gocen de algunas de estas propiedades, pero al estar mezclados con otros elementos o bien se diluyen debido a su menor proporción de cacao o bien añaden otras propiedades que pueden no ser tan beneficiosas.

Si te gusta el chocolate y de vez en cuando te gusta darte un capricho, esta sería una buena opción. Como opción «dulce» tras una comida es mejor que otras posibilidades con azúcares añadidos o mucho menos saludables.

Hay que tener en cuenta que lo mejor es consultar con nuestro profesional médico en caso de dudas o de querer introducir nuevos elementos en nuestra dieta, como siempre decimos. Solo ellos podrán ajustar nuestra dieta y podrán aconsejarnos de forma mucho más personal según nuestras necesidades.

Referencias:

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La información proporcionada en este artículo no reemplaza la relación entre el profesional sanitario y su paciente. En caso de duda, consulte siempre a su profesional sanitario de referencia.