Afrontar el diagnóstico de la diabetes

El diagnóstico de la diabetes no es fácil de asimilar en muchas ocasiones, y requieren de un proceso de adaptación que puede dilatarse en el tiempo.

Afrontar el debut de la diabetes

Hay momentos en la vida en que nos vemos obligados a afrontar situaciones que pueden superarnos emocionalmente. El debut suele ser un proceso que requiere un tiempo de adaptación y comprensión, tanto por parte del paciente como de su entorno.

Se trata de una patología que pese a ser tratable no tiene cura, y supone un cambio importante en la vida de las personas que la padecen. El diagnóstico de la diabetes suele suponer un antes y un después debido en gran parte al desconocimiento que se tiene y al temor que esto provoca.

Pero… ¿cómo se afronta estar en tratamiento de por vida? o ¿cómo llevar un control en la alimentación, contando hidratos y siendo estricto en los horarios? La psicología estableció unas etapas principalmente ideadas para el duelo (On death and dying, Elisabeth Kübler-Ross), que también se han aplicado posteriormente a otros tipos de procesos traumáticos que nos pueden suceder.

Las cinco etapas del proceso

Como decíamos, estas etapas fueron inicialmente descritas para afrontar la pérdida de un ser querido, pero también son aplicables al diagnóstico de la diabetes. Hay que decir que no todas las personas pasan por estas fases o que si pasan, lo hagan por el mismo orden. Estas etapas son las siguientes:

1. Negación

Ante cualquier experiencia negativa en la vida solemos pensar aquello de “esto no me puede estar pasando a mí”. La negación es el primer e inevitable paso antes de empezar a asimilar lo que nos está ocurriendo. A pesar de que el diagnóstico sea firme, o de que todas las pruebas indiquen que así es, cuesta admitirlo.

En estos casos hay que pensar y darse cuenta de que no somos los únicos en esta situación, que hablar de ello ayuda y que hay muchas personas que pueden echarnos una mano si es necesario. Mientras neguemos la realidad no seremos capaces de continuar con nuestra vida.

2. Ira, frustración o indiferencia

Enfado por el diagnóstico de la diabetes

Una vez asumido el diagnóstico viene otra pregunta clave “¿Por qué a mí?”. La respuesta es difícil sino imposible de obtener. De repente tenemos que empezar a controlar lo que comemos, a hacer ejercicio para mantenernos sanos, a inyectarnos insulina o medir nuestros niveles de glucosa cada dos por tres… un montón de cosas que antes no teníamos que hacer. Es una carga que sirve para tener una vida completamente normal, pero una carga al fin y al cabo.

Hay que tener presente que estando enfadado es casi imposible resolver problemas. Que las personas de nuestro alrededor pueden sufrir y sentir nuestra ira cuando probablemente solo quieran ayudarnos y eso todavía empeora más la situación.

3. Negociación

Esta fase intermedia nos llega una vez asumida la enfermedad y superada la frustración y el enfado. Generalmente es una etapa en la que sentimos bastante agobio por la nueva situación pero llegamos a pensar que no necesitaremos tratamiento o que no es para tanto, disminuyendo la importancia de lo que sucede para sentirnos mejor.

La depresión en el diagnóstico de la diabetes
La depresión es una de las etapas para llegar a la aceptación de la enfermedad

4. Depresión

“Todo ha cambiado, ya no valgo para hacer aquello que me gustaba, no sé qué pasará si tengo un ataque”. Hay muchas sensaciones negativas que se experimentan a la hora de hacer frente a aquello que todavía desconocemos en profundidad.

El simple hecho de pensar en el futuro nos pone nerviosos por la cantidad de cosas de las que nos tendremos que ocupar. Y pensar que nos espera toda una vida así suele causar una sensación de tristeza y a veces ansiedad.

Nunca hay que descartar recibir ayuda psicológica si no somos capaces de superar esta fase. No es malo en absoluto, pues lo importante es afrontar todos estos hechos y ser capaz de dejarlos atrás.

5. Aceptación

Superadas todas las fases anteriores llega por fin la aceptación de la enfermedad. Somos conscientes de que nos acompañará toda la vida pero que eso no supone el fin de nada. Con el tratamiento y los cuidados adecuados nuestra vida podrá ser normal.

Cosas que nos pueden ayudar

El doctor Alan L. Rubin en su libro Diabetes para Dummies  (Granica, 2005), empieza explicando algo muy importante para todas las personas con diabetes: no estáis solas. No hablamos de aquello de «mal de muchos consuelo de tontos», sino más bien de que tener diabetes no es el fin del mundo, y de que hay muchas pruebas de ello.

Mucha más gente de la que creemos está en la misma situación. Incluso gente que ha conseguido auténticas proezas en su vida. Lo que viene a demostrar que el diagnóstico de la diabetes es un golpe del que nos repondremos más pronto que tarde.

En esta conferencia que se realizó durante el Diabetes Experience Day de 2017, el psicólogo y educador en diabetes Iñaki Lorente nos explica como fue su proceso y nos da algunos consejos para afrontar el diagnóstico de la diabetes y la vida con la enfermedad. Lorente debutó con diabetes a los 30 años, así que suma su experiencia vital a su experiencia profesional.

Desde Soluciones para la Diabetes queremos dar ánimos a todas aquellas personas que hayan debutado recientemente, o que conozcan a alguien que esté viviendo esta situación.

Si queréis más información sobre la diabetes podéis encontrar todas nuestras guías en la biblioteca de Soluciones para la diabetes.

Referencias:

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La información proporcionada en este artículo no reemplaza la relación entre el profesional sanitario y su paciente. En caso de duda, consulte siempre a su profesional sanitario de referencia.